ENTREVISTA: YON GONZALEZ

Yon González acaba de comenzar el rodaje de la sexta temporada de 'El internado', se prepara para rodar dos nuevas películas y sueña con su debut teatral.

A sus tan sólo veintitrés años, este vasco se ha convertido en una joven promesa del cine español, perseguido por las fans allá donde va. Tras debutar en 'SMS, sin miedo a soñar', se ha metido al público en el bolsillo con su interpretación de Ivan en 'El Internado'.

¿Qué novedades trae la sexta temporada de 'El Internado'?
Muchas. La serie cada vez se pone más tensa y dramática. Según nos acercamos al desenlace, las situaciones se complican y habrá alguna que otra pérdida.

No hemos podido escapar de la Laguna Negra, Iván está enfermo y no es capaz de pedir ayuda a nadie. Su forma extrema de ser le llevará a estar muy sólo, intentará ayudar a su madre y sacarla del psiquiátrico. Es el líder y quiere seguir siéndolo sí o sí.

¿Tiene muchos puntos en común con su personaje?
Casi ninguno, yo siempre que tengo un problema busco ayuda en los míos, me quieren y me protegen, no tengo esa mala leche que tiene el personaje.

¿Cómo afrontas el fenómeno fan?
Como puedo. No es fácil, sobre todo cuando te encuentras con una escuela entera. Las chicas solas son más tímidas pero, en grupo, pierden la vergüenza y no hay quien las pare.

¿Tiene ganas de asumir nuevos retos?
Sí, tengo en mente una película con Xavier Villaverde y otra con Xavi Giménez. Tengo que empezar a preparar el guión pero el personaje que quieren que haga es muy interesante.

¿Le atrae más el cine que la televisión?
Siempre que el proyecto sea bueno y se cuiden los detalles, sí. Con 'Mentiras y gordas' no tuve una buena experiencia pero espero que no se vuelva a repetir.

¿Le incomodan las escenas de cama?
No, las llevo bien. Si lo exige el guion y están justificadas, no tengo ningún problema para desnudarme.

¿Ha notado su evolución temporada tras temporada?
Sí, ahora estoy más tranquilo y seguro que cuando empecé, pero no hay que relajarse. Igual que escuchas una buena crítica, al día siguiente puedes escuchar una mala. Lo importante es el trabajo diario.

Los buenos resultados de 'El internado' también dan vértigo. Con este personaje he podido estar a la altura, pero quién sabe si me pasará eso con el próximo que me ofrezcan.

¿No se atreve con el teatro?
Me encantaría. El día que acabe El Internado, lo primero que voy a hacer es teatro. Es una de mis asignaturas pendientes y sé que voy a aprender una barbaridad actuando sobre las tablas.

Decidió probar la interpretación siguiendo los pasos de tu hermano, ¿se arrepiente?
Para nada. Mi hermano es, siempre, el que mejores consejos me da. Es un actor maravilloso, le gusta ir paso a paso y tomarse con tranquilidad la profesión. Aitor siempre será para mí un referente.

¿Cómo llevan el hecho de competir en la misma profesión?
Bien. En esta próxima película de Xavier Villaverde hicimos juntos el casting, el lo bordó pero me cogieron a mi por la edad. Entre nosotros no hay envidias, siempre que seamos uno de los dos el elegido estaremos contentos, todo queda en casa.

¿Tiene la sensación de estar viviendo muy rápido?
Lo estoy haciendo. Al principio, era muy estresante ahora ya lo tengo asumido. Sé que quiero ser actor y he aprendido a llevar de otra manera mis inseguridades.

¿Cómo capea las intromisiones en tu vida personal?
Eso nunca lo entenderé. Siempre me ha interesado poco la vida de los demás y no deja de sorprenderme que la mía suscite tanto interés. Sin embargo, tampoco me enfado. Tendría luego que desenfadarme y no soy amigo de cargarme con doble trabajo.

¿Qué final tiene pensado para 'El Internado'?
Me gustaría morir pero seguro que lo que me escriben es bueno. Hasta ahora, no tengo ninguna queja con el desarrollo de mi personaje.

¿Cree que está agotada la trama de la serie?
No, además de contar con un reparto increíble que les apoya, los guionistas son muy buenos. Por ahora, la trama da para mucho más.

Vía Vertele