ANA CELIA DE ARMAS, UNA ROSA… DE CUBA
La joven actriz interpreta a Mariè, una bella rompecorazones, en la última película de Manuel Gutiérrez Aragón.
Tiene diecisiete años, el calor de su Cuba natal en las venas y un largo futuro como actriz por delante. Sin experiencia en el mundo del cine, fue elegida para co-protagonizar “Una rosa de Francia” por uno de los más grandes e importantes directores españoles. Ahora, a Ana Celia se le abre un importante camino bajo sus pies.
La joven actriz interpreta a Mariè, una bella rompecorazones, en la última película de Manuel Gutiérrez Aragón.
Tiene diecisiete años, el calor de su Cuba natal en las venas y un largo futuro como actriz por delante. Sin experiencia en el mundo del cine, fue elegida para co-protagonizar “Una rosa de Francia” por uno de los más grandes e importantes directores españoles. Ahora, a Ana Celia se le abre un importante camino bajo sus pies.
Basecine: ¿Cómo llega este guión a tus manos?
Ana Celia de Armas: La verdad es que no “llegó”, yo todavía era una estudiante allí, en Cuba, y decidí presentármela casting. Le gusté y me eligió.
B: ¿Por qué crees que te eligió a ti y no a otra actriz?
ACdA: Pues no lo sé, pero estoy muy contenta de que lo haya echo. Aún soy muy joven y Manuel (Gutierrez Aragón) me ha dado una gran oportunidad.
B: Estudias interpretación, ¿no es cierto?
ACdA: No exactamente. Es una escuela que hay en la Habana donde se estudia de todo y te acaban introduciendo en el mundillo; pero yo no soy muy buena estudiante…
B: Pues en la película no lo parece.
ACdA: (se ríe) Me refiero a matemáticas, geografía…
B: Vale, vale, entonces a la hora de actuar eso no importa tanto…
ACdA: Así se lo debió de parecer a Manuel.
B: ¿Has compaginado tus estudios con el rodaje?
ACdA: No, tuve que pedir que se me atrasara un año para poder rodar la película. Perdí lo que llevaba de año pero ha merecido la pena.
B: ¿Cuándo supiste que lo tuyo era actuar?
ACdA: Creo que desde siempre. Toda la vida me han gustado los escenarios, las actuaciones… pero yo no crecí en La Habana, sino en un pueblo mucho más pequeñito. Así que hasta que no fui a la capital no pude estudiar nada relacionado, por que en mi pueblo no había nada.
B: Háblanos un poco de tu papel en la película.
ACdA: Es una mujer joven, caprichosa, algo malcriada, que se tiene que abrir paso en la vida…
B: ¿Te sientes identificada con tu personaje?
ACdA: Sí, bastante. Yo también soy muy impulsiva, y me gusta conseguir lo que quiero. Le echo mucho morro a la vida, hay que luchar por lo que uno quiere.
B: Podría decirse que Mariè, tu personaje, es una “mujer fatal”… ¿en eso también te sientes identificada?
ACdA: (suelta una carcajada) Bueno, yo no creo que sea realmente una mujer fatal… simplemente, sabe que gusta a los hombres y se aprovecha de ello para conseguir lo que quiere.
B: Las dos sois cubanas, jóvenes, guapas…
ACdA: Muchas gracias… (sonríe). Sí soy cubana, y también soy un poco joven… solo tengo diecisiete años. Cuando interpreté a Mariè, tenía dieciséis, como ella.
B: Como cubana que eres, ¿cómo crees que refleja la problemática de tu país esta película?
ACdA: No creo que lo represente de ninguna manera. Es una historia atemporal, podría estar basada en cualquier año.
B: Entonces, ¿crees que es básicamente una historia de amor?
ACdA: Sí, sin duda.
B: ¿Cómo ha sido tu relación con el resto del equipo?
ACdA: Estupenda. Son todos maravillosos, y me han ayudado mucho: Álex (González) es sensacional, “Pichi” es un encanto…
B: ¿”Pichi”?
ACdA: (se ríe) Si… así llamamos a Jorge (Perugorría)… además de un gran actor, es un cielo.
B: En la película hay escenas en las que sales bastante ligerita de ropa, e incluso semidesnuda. ¿Te costó rodar esas escenas?
ACdA: Muchísimo. Pasé una vergüenza terrible. Pero todos me apoyaron mucho y al final no m costó tanto como había creído.
B: ¿Te da vergüenza pensar que tus padres pueden ver la película?
ACdA: Ay… (suelta un pequeño gritito y se tapa la cara con las manos) no me lo recuerdes, no me hagas pensar en ello…
B: ¿Te gustaría seguir en el cine?
ACdA: Sí, por qué no, pero me gusta más el teatro. Me gustaría convertirme en una actriz de teatro profesional. Al fin y al cabo, el cine tiene mucho menos mérito… como dice “Pichi”, el cine es la profesión en la que más tienes que esperar del mundo.
B: ¿Esperar?
ACdA: Sí… maquillaje, luces, decorado, repites escena, no la repites… se pierde muchísimo tiempo al final.
B: ¿Hay algún papel que te gustaría interpretar?
ACdC: Tal y como está el panorama hoy en día, me conformo con poder trabajar… aunque no me gustaría interpretar siempre a niñas buenas o angelicales, que por mi físico es lo que más me puede pegar.
B: ¿Tienes alguna oferta ahora?
ACdA: Acabé de rodar una película en diciembre. Aún no te puedo decir nada de ella… solo que se estrenará en el Festival de San Sebastián.
Vía BaseCine
